El nuevo single de Ne-Yo no supone ninguna ruptura traumática con el sonido, los motivos de estilo recurrentes (esa melodía tocada en la guitarra acústica) o las letras que uno puede esperar de este caballero. Normalmente su música me deja indiferente. No es por su interpretación, que sin ser espectacular ni demasiado singular es ajustada, emotiva y mucho más potable que las de otros artistas de R&B masculinos contemporáneos. No es por la producción porque antes de tener una carrera discográfica trabajo como songwriter para otros artistas y sabe (quizás demasiado) como presentar sus temas para que brillen en una producción espaciosa, moderadamente moderna, normalmente luminosa, encontrar la zona en la que las necesidades industriales se solapan con los elementos que pueden y suelen cautivar al público, usar todos los trucos y lugares comunes de modo que uno crea que es talento como signo de una personalidad propia. No son sus canciones, que en las voces de otros intérpretes ya se han mostrado soberbias y memorables. Puede ser que quizás trata de parecer demasiado agradable, que trata de presentarse y sabe como capturar tu atención pero nunca quiere parecer implicarse demasiado, hablando de temas menores, cosas pequeñas, situaciones cotidianas en un lenguaje escasamente rebuscado, como reacción a su destreza para crear tema y evitar la sombra de la arrogancia y la pedantería.

Si sus canciones están llenas de la inquietud, desorientación e incertidumbre que las emociones y relaciones humanas en toda su fragilidad proyectan en un mundo en las que estas son imprescindibles para garantizar la validez y certeza del cada vez más sofisticado, de diseño, caro y consumista estilo de vida que llevamos (o deseamos llevar), podemos admitir que estas se pueden mostrar con mayor precisión y claridad en su exposición. Como él mismo hace en este “Closer”, posiblemente una de las canciones del año, el nacimiento del deseo por poseer a otra persona, el miedo y el éxtasis a entregarse sabiendo que como Sísifo el destino nunca se alcanza, sólo existe el viaje del que uno no puede escapar.

En la página web de la revista The Wire han colgado la entrevista íntegra que el periodista Philip Sherburne hizo a Carl Craig para el invisible jukebox del número de este mes. La entrevista es bastante más larga que la editada y publicada, quedando algunos fragmentos bastante jugosos.

Horsepower Productions
"Gorgon Sound"
FROM GORGON SOUND/TRIPLE 7 (TEMPA) 2000

I don't know this one.

It's Horsepower Productions, from the Tempa label — the first wave of Dubstep. I chose it in part because although it's mostly dub based, I can hear something Detroitish in their harmonic sensibilities. Do you follow Dubstep?

Not actively, no. I had this really intense conversation with a guy at Rush Hour records in Amsterdam, a guy that was shopping there. He was almost, he was trying to force me to like Dubstep. You know, to just — to just tell him that I thought it was amazing. I was like, "I don't even know!" I know what Dubstep is but I don't know much of the music. He's like, "Ok, listen to this!" And the track that he played was a really boring dub reggae-ish record. Dub is great for three minutes each track. But 10 minutes, it's like, what the fuck is this? I like music. I don't care if it's Techno or House or dub reggae or Trance… Ok, I do kinda there. But if it's a good track, that's what I'm interested in. I don't care what style it is. If fucking Britney Spears makes a track that's good, I'm gonna like it.

If you win this Grammy you'll be remixing her stuff. Well, if she makes any more music, which is another question.

Mmm, maybe. If she got a hundred grand! [Laughs]

I saw Skream last night, and it reminded me of the power of a good DJ, simply because I don't know the genre inside and out, and he made sense of it, made it sound really fresh and varied. When you don't know a genre, you need a DJ to act as a guide. It's a cliché, but Skream really told a story.

I haven't heard him play before. And what Diplo does is considered what?

Diplo is sort of related to the next track, so I'll play it anyway.

I played with him before, and he plays really electro-y, like old-school electro. At least that set was. I know that stuff that he did for M.I.A.


Ghislain Poirier
"Blazin' feat. Face-T (Modeselektor Remix)"
FROM INTERNET RELEASE (BIG DADA) 2008

These are Germans remixing a guy from Montreal.

Who is it?

Modeselektor remixing Ghislain Poirier.

Ok.

This seems to be a new mode of post-Techno, sort of what Diplo is doing: an omnivorous free-for-all, everyone putting their beats up online and remixing everybody else.

[Virtual silence from Craig]

Me parece particularmente interesante la respuesta al segundo corte. Actualmente tenía pensado escuchar el disco de este año de Ghislain Poirier ya que según el periodista Sasha Frere Jones, es uno de los representantes del “lazer bass”, entre los que se cuentan también, por lazos directos, Rustie o Hudson Mohawke, que según Martin Clark representan el sonido wonky. A decir verdad llevo unos cuantos meses tratando de colocarlos en algún sitio más allá de sus influencias más o menos claras (el hip-hop abstracto de hace unos años) pero sólo se me ocurren clichés sobre la sociedad de la información.

Según la vigésimo tercera edición del diccionario de la Real Academia de la Lengua Española peluco es un reloj ostentoso de pulsera o bolsillo. Wiley va por el tercero este año.

El nuevo single de Crystal Castles

El adelanto del primer single de Keeley Hazell

¡Viva!

Una cosa que se me había pasado: un artículo de la BBC sobre el 50 aniversario del Radiophonic Workshop (aquí otro de Time Out) que incluye videos con algunos de los instrumentos originales tocados en la actualidad. Advierten que es posible que para finales de año se publique una caja recopilatoria de distinto material de archivo. Ojalá sea en la línea del recopilatorio que publicó hace años Rephlex y que dejen un poco aparcado todo el material sonoro de “Doctor Who” (miles de horas de sonidos), ya que tiene una colección propia de recopilatorios. Ahora me arrepiento de no haber comprado de segunda mano este libro (disponible hasta hace unas semanas).

Y parece que hay confirmación de que Tristam Cary ha fallecido. Cosas de no fiarse cuando todas las noticias giran en torno a una sola fuente (una nota publicada en una página web dedicada a la serie anteriormente citada). Aunque yo ayer no lo hiciera. Es uno de los entrevistados en el documental “What the future sounded like” que subimos tiempo atrás.



Arrea.

Alguna vez me he encontrado con las bibliografías en español recomendadas paras cursos universitarios, sea en musicología o no. Aparte de toneladas de enciclopedias musicales y libros sobre los distintos períodos, suelen repetirse con frecuencia algunos textos teóricos. No falta un libro de Theodor Adorno, ya sea porque es una manera de parecer serio o porque su discurso aún empapa nuestros lugares comunes en las conversaciones. Otro es “La estética musical desde la Antigüedad hasta el siglo XX” de Enrico Fubini. Según la reseña en la web de Alianza Editorial:

“En esta obra, considerada desde hace años un clásico de la disciplina, Enrico Fubini arroja luz sobre los temas fundamentales, las corrientes más importantes y los problemas clave de la estética musical. Proporciona así una síntesis cronológica del pensamiento musical en Occidente, desde los poemas homéricos hasta las últimas tendencias contemporáneas, que comprende las reflexiones sobre la música no sólo de los propios músicos y estudiosos de la estética, sino también de filósofos, matemáticos, físicos y pedagogos”.

Así, que estética. También vale más de 40 €. Otro es “Fundamentos de Historia de la Música” de Carl Dahlhaus. Historia. Y el último, a veces no aparece, es “Tratado de los objetos musicales” de Pierre Schaeffer. Gracioso o no, normalmente suelen ser los únicos textos que no están descatalogados, así que no se sabe muy bien si es por su calidad o por su disponibilidad.

El libro supongo, es interesante particularmente por introducir el concepto de escucha acusmática. El término procede del nombre que se daban a los discípulos de Pitágoras que escuchaban sus enseñanzas durante cinco años en silencio y con este detrás de una cortina. Otra aceptación es la de un ruido que nos sobresalta pero que no conocemos cual es su fuente. Como ya suponen, el escuchar sonidos sin tener presentes las fuentes que los producen es algo a lo que estamos bastante habituados ya sea escuchando una canción en cualquier formato o mediante la radio. El término sirve para bastantes cosas. La música electroacústica, según quien, se denomina acusmática, ya que las fuentes sonoras originales no tienen ninguna importancia o jerarquía sobre el resultado sonoro final. También sirve bastante para estructurar la idea de sonido diegético en el cine. Básicamente, la idea que uno tiene de una película es un tipo con una cámara y otro con un micrófono, algo así como una fotografía sonora de esa interpretación. Pero en realidad el sonido es parte de la narración de la historia y debe introducirte en ella. Además quizás uno no necesita que un coche frene cuarenta tomas seguidas. O la música integrada con todos los diálogos o efectos de sonido. En el sample del libro que viene en “Audio Culture” la idea que propone Schaeffer es que no hay una oposición entre acústica y acusmática, siendo una lo real y otro su sombra, sino que la acusmática se centra en las relaciones subjetivas que se producen durante la escucha y en el fondo el proceso de escucha e interpretación de los objetos sonoros (los sonidos). Ya se pueden imaginar la razón por la que nunca han visto esa palabra en una revista de rock.

De todas maneras estaba con la mosca detrás de la oreja porque uno de los libros recientes sobre los orígenes culturales de los sonidos y sus medios de reproducción, “The Audible Past” de Jonathan Sterne (otro libro que no he leído), despacha en el índice de términos a Schaeffer con una sola mención. Así que leo lo siguiente en la página veinte del susodicho:

“Since the power to split sources and copies is the most coomon definition of sound-reproduction technology, it warrants some scrutiny. Pierre Schaeffer, the composer who pioneered musique concrete, argued that sound reproduction technologies produced “acousmatic” sounds –sounds that one hears without seeing the source. John Corbett extends the line of thought by using an explicitly psychoanalytic framework to talk about reproduced sound in terms of visual lack: “It is the lack of the visual, endemic to recorded sound, that initiates desire in relation to the popular music object”. For Corbett, our inability to see the recording leads us to want it, to attend to it. Barry Truax and R. Murray Schafer have coined the term schizophonia to describe the “split between an original and its electroacoustic reproduction” enabled by sound-reproduction technologies. The Greek prefix schizo- means “split” and also has a convenient connotation of “psychological aberration” for these authors. Truax and Schafer also argue that reproduction removes sound from its original context.

By my own historicization of practices and ideologies of sound, one could hypothesize a particular context where the acousmatic definition of sound reproduction holds explanatory force. Indeed, the concept of acousmatic sound may seem intuitively plausible to many people today. But that does not make it true. Recall, with Stuart Hall, that that which is most obvious is most ideological: “When people say to you ‘Of course that’so, isn’t it?’ that ‘of course’ is the most ideological moment, because that’s the moment at which you’re at least aware that you are using a particular ideological framework, and that if you used another framework the things that you are talking about would have a different meaning.” Acousmatic or schizophonic definitions of sound reproduction carry with them a questionable set of prior assumptions about the fundamental nature of sound, communication and experience. Most important, they hold human experience and the human body outside history”


Y continúa dando cuatro razones: que la idea de la comunicación frente a frente (interpersonal) es la que debe servir de medida a cualquier otra actividad comunicativa, que al establecer esta prioridad los sentidos se sentirán desorientados frente a la reproducción tecnológica debido a la falta del cuerpo y los instrumentos, que la tecnología fragmenta lo natural de esta comunicación frente a frente esto es la unidad del cuerpo humano como signo de lo puro y que la tecnología de grabación es inerte en el proceso de escucha y permite una separación completa entre el sonido y la fuente. En lo básico el libro quiere proponer que los procesos de escucha son aprendidos y que varían con los medios de reproducción, como el mundo visual es diferente tras la invención del cine, o en otro contexto y tampoco muy exactamente, que la literatura está mediada por las convenciones culturales e históricas de cada época y que no podemos ignorarlas sin equivocar el significado primario de la obra.

La primera entrada de este blog pensaba ser una explicación largísima extendiendo el “En este blog hablamos de canciones”, primero definiendo a que nos referimos con canciones y decidiendo que nos referimos a las grabaciones, y cual es su estatus dentro de la música pop, ya que, bueno, uno cuando compra un libro de Chagall, sabe que está viendo reproducciones de un cuadro y que el cuadro original es la obra de arte, pero con una canción es un poco más difícil, ya que esta varía con el tiempo, desde su concepción a la maqueta el disco o las interpretaciones en directo, pero no puedo decidir que es la interpretación del músico ya que bueno, Elvis está muerto así que las canciones de Elvis sólo existen como residuos de un esplendor pasado y a decir verdad yo no las siento así y además por edad nunca he visto vivo a Elvis, así que no hay manera de que lo puedan demostrar, pero claro me dirán escucha este directo suyo, y yo les diré “Supongo que te refieres a que escuche la grabación de un directo de Elvis ¿no?”, además el otro modelo quizás es válido para el creador pero no para el oyente, yo por ejemplo jamás podré ver si los temas de Morning Musume eran mucho más viscerales en la gira de presentación, sino que mi opinión se deriva de las grabaciones y como en los directos la mayoría de los grupos tratan de reproducir lo que suena en los discos, es difícil imaginar que las grabaciones son “residuos” o “pálidas imitaciones” así que me importa bien poquito lo “artificiales” que resulten y que no se puedan tocar en directo (menuda limitación a la imaginación), etc… Era una gran entrada, pero muy, muy compleja. Así que no se preocupen si veo siempre este blog como una empresa fallida.

Hablemos de otras cosas. Me apetece escuchar el nuevo disco de Matmos “Supreme Ballon”. Se supone que es un homenaje a los discos pioneros de música electrónica, ya sea en su faceta “cientifista” o en la kitsch. Todos los sonidos del disco están construidos a partir de sintetizadores de todas las épocas, muy conocidos o apenas escuchados, contemporáneos o antiguallas. Quizás esto suena raro. Un sintetizador debería ser un sintetizador. Sí y no. Evidentemente no puedes hacer lo mismo con un sintetizador que tiene un teclado con las notas como en un piano y en uno que no las tiene. Pero tampoco es una cuestión de potencia, también depende de cómo se genera el sonido (3 o 4 modelos distintos), o en el caso de los analógicos las piezas con las que están construidos. Cada constructor resolvía los problemas que se le planteaban según podían o imaginaban, así que las posibilidades son distintas, o simplemente el acabado de las piezas, provocan sensaciones diferentes. A mi por ejemplo, la idea de Terry Riley tocando el ARP 2600 (el mismo que tocaba Herbie Hancock en los discos de Headhunters) en uno de los temas extras, me llama poderosamente la atención (independientemente de lo que toque al final Riley). O Marshall Allen (de la Sun Ra Arkestra) tocando un solo con un sintetizador que funciona soplando (Scott Walker quería hacer algo parecido pero usando a Evan Parker). Pero la verdad es que las ediciones según el formato son distintas (el tema de Riley está en la edición digital y en vinilo) o encontrar varios temas extras como descargas o en recopilatorios, distrae bastante. Además el problema con Matmos es que pueden acertar de lleno o hacer el ridículo sin paliativos, y normalmente uno no tiene idea de cual es cual hasta pasado un tiempo. Este es el videoclip de adelanto. En su página dicen que mejor verlo con más definición que en Youtube, así que lo han decidido colgar en uno de los Podcasts del portal de músicas más o menos raras Brainwashed, que les dejo aquí por si quieren descargar cosas como Coil, Current 93, Zev, Trans Am, etc. No se ve mucho mejor, pero al menos puedes distinguir las caras.


En otras noticias más o menos indies dicen que esta canción de los Mistery Jets es muy, muy buena.

Aunque parece que la foto no es de Miley.


No me puedo comenzar a imaginar lo increible que va a ser la vida de Miley Cyrus a partir de ahora, sea cierta o no esta foto.

Aunque uno ha estado (muy, muy) fuera de juego este fin de semana, había suficientes cosas con las que entretenerse:

Rafa Cervera escribe un artículo sobre la No Wave sobre su radicalidad y extremismo además de la paradoja que ahora resulte algo fashion, vendible, con la que llenar páginas en revistas de tendencias, suplementos dominicales y otras variedades de prensa para lectores que no se enteran de nada de lo que significó aquello. Los lectores de El País retiran un momento la vista de la pantalla y dicen: “Uf, menos mal que no estaba hablando de mi”.

Alguien tuvo la ocurrencia con motivo de la publicación del nuevo libro de Richard Ford de hacer un artículo sobre la influencia de la gran novela americana en el mundo del rock. No es que la idea no sea interesante, que lo es, pero si sólo te sirve de excusa para citar unos cuantos discos que den sentido a tu tesis y no la desarrollas,… Lo gracioso viene cuando esos términos, sacados de la esfera anglosajona, se usan sin tapujos dando por supuesto que todo el mundo sabe a que se refieren y en que contexto lo hacen, se publican en un diario que dice ser “El periódico global de noticias en español”. Pocas collejas le cayeron desde Sur y Centroamérica para lo que merecía tal sobrada rockera…

También me llamó la atención este artículo sobre el cine y el mundo del rock. Además de este apéndice o notita escrita por Diego Manrique.

En The Guardian hay un artículo en apariencia fascinante sobre la influencia de “Ubú Rey", Alfred Jarry y la patafísica en el mundo del rock.

"Religious narratives show up in all expressive forms, from politics to music. I see a lot of the religious narrative of Puritanism in the indie music scene; the idea that, to have the pure divine experience, it has to be direct and unmediated. So the smaller and more intimate a show is, the 'truer' fans believe their experience was, compared to someone who saw them later on in a bigger venue. That's why so many people claim to have seen the Sex Pistols at the 100 Club. You can also find the aesthetic of Puritanism in the way indie people present themselves, such as childlike clothing, this idea of returning to the golden age of childhood or the musical past."

Ya mencionamos de pasada el libro en el blog anterior este libro que parece se publica ahora en el Reino Unido. El problema supongo se presentará si uno no lo toma como una manera de iniciar argumentos a favor o en contra y dejarlo como algo intocable o que no se entera de nada (e igualmente no querer ni tocarlo).

Y el NME ha publicado una lista con los 50 nombres que marcarán el futuro de la música rock. Sin desperdicio como siempre (en el retrato de los votantes):


50. Nova Dando & Petra Storrs (Designers)
49. eMusic
48. Franki Chan (DJ)
47. Ian Rogers (Software developer)
46. Adem
45. Spank Rock
44. Owen Pallett (Producer)
43. James Rutledge (Remixer)
42. Strange Place Club (Promoters)
41. The Hype Machine
40. Honey Owens (Atlas Sound/Valet and Rad Summer)
39. The Horrors
38. David Brewis (Producer, Promoter, Field Music)
37. Mike Skinner
36. HeartsRevolution
35. NASA (Supergroup)
34. Tony Allen (Percussionist)
33. Ladyfest (Festival)
32. Diplo
31. Sam Kilcoyne (Founder Underage Festival)
30. Huw Stevens (DJ)
29. JME
28. The Futureheads
27. Bjork
26. Samuel Dust (Late of The Pier)
25. Tetonik Kids of France
24. Alex Hancock (Head of music for Skins)
23. Danja (Producer)
22. James Ford (Producer)
21. Santogold
20. Jonathon Ive (iPod designer)
19. The Canadian Government (Subsidies to bands)
18. Kate Moross (Designer)
17. Dirty Projectors
16. Last.fm
15. Geoff Barrow (Portishead)
14. Italians Do It Better (Label)
13. Wiley
12. Dev Hynes (Lightspeed Champion)
11. Club Smell
10. Crystal Castles
09. Alex Turner
08. Damon ALbarn
07. Rick Rubin
06. Saam (Video director)
05. Burial
04. Fucked Up
03. Radiohead
02. MIA
01. David Sitek

OMG

Se supone que esta es la lista de ventas de singles británicos de esta semana.

1. Madonna-4 Minutes
2. Sam Sparro-Black & Gold
3. Estelle-American Boy
4. Wiley-Wearing My Rolex
5. September-Cry For You
6. Flo Rida-Low
7. Usher-Love In This Club
8. will.i.am-Heartbreaker
9. Duffy-Mercy
10. Scouting For Girls-Heartbeat


Lau Nau: Painovoimaa, valoa from Sami Sänpäkkilä on Vimeo.



Definitivamente, necesario verlo en Vimeo en HD.

Muere Jimmy Giuffre

Estimado sr. Conte:

Folk Britannia 2 y 3.

Pensaba terminar de subir otra serie, pero ya lo hago la semana que viene, quiero aprovechar el fin de semana para terminar de hacer cosas pendientes. Ya editaré la entrada y borraré esta entonces.


R. Kelly- Hairbraider
Cargado por youngkingz12


- Cada vez que hablo sobre R. Kelly me siento incómodo y lleno de desasosiego como si estuviera yendo en contra de mis creencias y principios. Lo fácil sería descartar su música de un plumazo, reírnos de su vulgaridad mientras buscamos solistas y grupos tan políticamente correctos y adecuados al canon estético contemporáneo que nos eviten tener que defenderlos, que su grandeza es evidente e innegable. O retrotraerse al pasado buscando el salvajismo, el exceso y la crudeza idealizados por nuestras creencias para criticar un presente en el que esos mismos principios son negados e ignorados. No quiero defenderlo, ni presentar su personalidad pública o privada como un mal menor ante la personalidad de su obra. No quiero reducir la catadura moral del personaje, un ser humano repelente, egocéntrico, rastrero, zafio y capaz de hacer lo que se le antoje o llegar hasta donde sea por lograr conseguir satisfacer sus deseos, ya sean en el campo musical, el personal, el económico o el sexual como lleva demostrando desde hace décadas. Es todo lo contrario a querer presentar su obra situándola en un plano superior y distinto al que se encuentra su creador, digo que es importante por como toda su música está modulada por esa personalidad, hasta que punto todos los detalles y formas están embebidos, surgen o son un reflejo de ella, como estos son los rasgos reconocibles de un autor. Y si la música puede ser admirada o valorada por como la personalidad del interprete o el creado parece emanar de ella, R. Kelly pica definitivamente muy alto. Y si esto nos lleva a replantearnos la validez de este argumento, tampoco es mala cosa.

Uno de los rasgos distintivos es esa capacidad de hacernos exclamar “no se como lo ha podido lograr pero se ha superado”. Esa necesidad que tiene de marcar el territorio, subiendo el listón de lo que otros productores están haciendo en la actualidad un par de palmos, y sentado poder mirarlos, satisfecho, desde arriba. Esto suele llevar aparejado el hecho de superar los límites del buen gusto, la paciencia de uno o el grado de tolerancia al exceso, lo que en sí no es necesariamente malo, pero reconocemos que lo decimos desde un país que no lo escucha con regularidad y monotonía en la radio, los clubs, los móviles o saliendo de los coches al pasar.

Su nuevo single se llama “Hair Braider”, adelanto de su nuevo disco y es su entrada a degüello en el mundo tan transitado en la actualidad del efecto autotune aplicado en las voces en la música negra. Sobre una meseta que se podría extender hasta el infinito de lo precisa y prístina que es en su exposición y ejecución construida con sus percusiones entre lo acuoso y el chasquido, sintes untuosos, guitarras cremosas de líneas entrecortadas, delays, ecos, va construyendo armonías, coros, multiplicidades de pistas creando la consabida atmósfera no apta para diabéticos en la que exponer de forma exhibicionista -con delectación autoerótica y una confianza en si mismo casi infantiloide- su intimidad, sus palabras, pensamientos y pulsiones. Todo su mundo girando en torno a la cama, todo dispuesto en una atmósfera asfixiante y terminal por entregarse de nuevo al juego de la conquista, su cuerpo convertido en una tarjeta de presentación de su masculinidad y su música en una extensión de las bazas que debe jugar, tan convencido de su excelencia e infalibilidad como conquistador y amante, creyendo de forma tan ciega que está tocando todas las teclas adecuadas que nada de lo que pueda hacer, en este caso abrir la boca, podrá estropear lo que descansa en su capacidad y solvencia (como productor). Y el hombre que subtituló su recopilatorio “The R in R&B”, el que acabó con el romanticismo y cualquier sutileza que pudieran tener las canciones sobre conducir al cantar “Baby you remind me of my jeep/ I want to ride it” lo logra de nuevo. La canción no es mala, enfrentándose a ella de forma consciente, tampoco buena. Pero no hagan la prueba en un sitio donde otros seres humanos tengan que padecerla, porque desearan su muerte. Y pronto.

- Gracias a un programa de música experimental/improvisada que se emite en Rinse FM tuve la oportunidad de escuchar uno de los dos temas que ocupan el nuevo single de Chris Watson publicado en vinilo por Touch Records. Los títulos “3m” y “10m” se refieren a la profundidad a la que estaban sumergidos los micrófonos en las corrientes marinas. No de manera muy organizada ni atenta al momento, he seguido su carrera desde “Weather Report”. Watson se gana la vida haciendo capturas de sonido del mundo natural, normalmente para documentales. Sus dos primeros discos en solitario eran básicamente eso. En “Weather Report” el panorama cambia y la combinación del montaje perturbador, casi psicodélico de distintas grabaciones en el tiempo y el espacio crea una narrativa omnisciente, divina, apoyada en una sensación de desorientación próxima al hiperrealismo lograda para su destreza en el campo de la microfonía. Recuerdo haber leído esto, pero seguramente está aderezado o mezclado, pero en alguna entrevista daba una anécdota muy clarificadora: un día lo llevaron a una clase de niños para que explicara su trabajo y consiguió hacerlos llorar a todos con una de las grabaciones. Era de un grupo de hienas devorando un cadáver, y en lugar de hacer una captura lejana, el tipo alejado con el micrófono dirigido hacia allá, había introducido algunos dentro del cadáver. “Weather Report” se mueve entre la composición moderna y las grabaciones de campo, pero es un disco completamente intuitivo en el que el oyente se puede sumergir (la última pieza está construida a partir de los sonidos de un glaciar avanzando y desmoronándose) y salir, asombrado, oyendo el mundo de una manera distinta. El decidir cual es la relación real de su trabajo con el mundo de la fonografía, el de la ecología acústica o si es un uso creativo basado en la acusmática en lugar de un registro “objetivo”, me queda un poco lejos. Tengo algunos textos al respecto pero todavía no he tenido tiempo de leerlos con detenimiento.


Tamaki Nami - Gokigendaze! ~Nothing But Something~
Cargado por PPouet


-Supongo que vi el videoclip por el hecho de que el nombre me sonaba. Mientras sonaba la canción pensé que en lugar de escuchar más música japonesa y descartar entre todo lo más potable, me encierro cada vez más en lo que conozco. El nombre dio resultado. Llevaba dos meses tratando de encontrar el rastro para poder volver a escuchar esta canción, que en su momento (hace tres años) odié. Después conecté con la larga coreografía. Y mientras la escuchaba esta mañana tenía los ojos llenos de lágrimas. Aunque ese siempre es un dato a tomar con reservas: no se si lloraba por la canción o por haber terminado y superado el reto de la búsqueda. En un reportaje de Woebot TV había un coleccionista de discos cuya librería era tan grande, tan desbordante, que en ocasiones, cuando necesitaba algún disco en particular pero que no tenía localizado prefería volver a comprarlo antes que ponerse a buscarlo. El mundo de las descargas digitales se parece cada vez más a esa situación, al menos en mi caso: tengo el videoclip de esa canción grabado en algún lugar.


- Ya he terminado el segundo capítulo del libro, dedicado en este caso al blues. McClary toma prestado un término que le da mucho juego para poder exponer sus ideas. El término es “signifiyin(g)” y es desarrollado por Henry Louis Gates en su libro “The Signifiying Monkey: A Theory of African- American Literary Criticism” y que consiste en la práctica por parte de los artistas de poder usar su imaginación e inventiva pero haciéndolo dentro de formas narrativas tradicionales, es decir, que el artista no trata de evadirse de la sociedad mediante su individualidad o la experimentación con el texto como fin último, sino que busca reforzar los lazos con la comunidad participando en aquello que la hace ser. El ejemplo que pone la autora es el de una grabación de un grupo de gospel (The Swan Silvertones). Siendo las armonías y la estructura de los himnos algo estandarizado, la interpretación del solista y el coro varía de concierto a concierto (aunque en lo básico hace lo mismo), y estas dependen de la actitud del público. Uno de los motivos básicos de la música afroamericana es la llamada/respuesta. Deben imaginarse que el contexto inicial de una pieza de gospel es la interpretación frente a la congregación. Si la interpretación es ajustada, como en una película, el público moverá el cuerpo al ritmo de la pieza, dará palmas, contestará a las palabras, exigirán que el intérprete continué. Y a esa llamada, el intérprete responderá cantando notas más altas, haciendo exhortaciones o cualquier elemento que se le ocurra para corresponder al público. La idea de alcanzar un clímax en un determinado momento no es necesaria y este intercambio dura lo que dura, unos segundos, minutos, hasta horas en el caso de los intercambios rítmicos en ciertas músicas africanas. Y es esta acción, esta unión de toda la congregación, lo importante y no tanto, lo sublime de la pieza como objeto cultural.

Al parecer, en su libro, Gates usa el blues como ejemplo (musical, el resto es literario). Todo el mundo ha oído hablar de la estructura de 12 compases del blues. Y esta convención estilista en la forma tradicional, lo consensuado. El blues, al menos en origen, era música de baile aunque tratara los temas más dolorosos y espinosos posibles, y la estructura llamada/respuesta está dispuesta de distintos modos, tanto en la composición (la guitarra contesta a la voz y esta hace lo mismo, las primeras líneas repiten el texto que llega a su conclusión con la respuesta a la situación planteada, etc.) como en la interacción con el público. E igualmente, como en el anterior ejemplo, uno puede hacerse la imagen del cantante, llevado por el fervor del público que grita, baila y silba pidiendo más, usando los elementos más extravagantes para asombrarlo, ya sea fingiendo ruidos con la guitarra, tocando más rápido, cantando de forma más expresiva o croando o imitando a un pollo. Desde esta perspectiva, no es difícil entender como cambio cuando la música fue recibida por el público británico, enfatizando y suprimiendo elementos: subrayando la interpretación, improvisación y técnica, rebajando el aspecto rítmico y el baile a un simple menearse admirando la obra (y el sentimiento) del individuo artista situado en la tarima del escenario, siempre por encima del vulgo.


- El videoclip de Bun B del que hablabamos el otro día. Y en la camiseta pone "smart is the new gangsta".

- Tijeras, que ya se ha pasado la hora de entrega.

-Entonces ¿proviene de aquí el término? (No necesariamente con el uso actual representando lo “comercial”, sino la tendencia dominante, por ejemplo, la corriente principal musical durante las últimas décadas ha sido el rock, sustituyendo al jazz)

- Encuentro el nuevo de Ellen Fullman. : D

- Apenas duermo un par de horas durante toda la noche. Hoy no creo que haga demasiadas cosas.

- En realidad si he hecho algunas. Quedarme dormido en cualquier lugar de la casa. Asco de día.

- Hablemos de cosas interesantes. El insomnio me sirvió para escuchar la buena sesión de Rustie en el programa de Mary Anne Hobbs. Si quieren descargarlo, prueben aquí (donde están almacenados semanalmente desde hace bastante tiempo.

- RECOPILATORIO DEL AÑO.

- ¿La música del nuevo anuncio de Heineken es de Adele?

- Spin se puede leer gratuitamente en su página web. En vez de optar por el conocido formato de la descarga en PDF, han optado por dirigir el tráfico hacia su página web (y en ella hacia los anunciantes). Ahora mismo hay archivos hasta octubre del año pasado.




- La teoría ridícula del día: Creo que la novedad que aportan gente como Dodos, El Guincho, No Age o High Places dentro del mundo del indie no está en sus fuentes e influencias sino en el uso que hacen de la tecnología para construir su mundo sonoro. En lo básico creo que pese a todo su discurso vanguardista, el indie como música es un estilo conservador y lo es porque sabe lo que quiere ser, no necesita construir un camino para llegar a un ideal, parte de la consagración y celebración de un estado actual y presente. Si ponemos el 86 como punto de partida, llevamos más de dos décadas en la que citar la música indie lleva a pensar en el mismo tópico: chicos blancos, media clase, post adolescentes, tocando guitarras, bajo, batería. Se que hay mucha más variedad en propuestas, intenciones e instrumentación, pero cuando llega el momento de presentarse ante el mundo exterior, dar el salto a la multinacional, entrar en la radio comercial, los grupos tienden más a parecerse a este estereotipo que a distanciarse del mismo.


La experimentación, que siempre la ha habido y según los periodos ha sido importante (el post-rock etapa Tortoise, coincidiendo con gente como Mogwai, Spiritualized, GYBE o los Radiohead más “liberados”) o secundaria (los refritos post-punk de hace unos años, el formato Strokes, el grunge) surge como medio de expresar la individualidad, separarse de la manada a la vez que integrarse dentro de los parámetros de la comunidad. Es decir que es algo que se acepta pero es una serie de parámetros que uno como oyente, puede ignorar cuando se encuentra entre “amigos”. Por eso me resulta interesante que se escojan nuevos modos de instrumentación en vez de adoptar las fórmulas conocidas de banda o artista en solitario, usando la tecnología para aumentar las capas sonoras o reducir el número de instrumentos para así hacer las cosas de otro modo. Eso es algo que si puede suponer un cambio. Aunque crea que la música que hacen sea más expansiva que experimental.

- ¿Debería escuchar el nuevo de Madonna?

- Parece que ya es un poco tarde para descargar la película de AKB 48.

- La cantidad de cosas que se han quedado en el tintero. Sigue sin convencerme este formato (uno es más consciente de las tonterías que dice normalmente) pero tampoco creo que pueda usar otro.

Muere Josetxo Anitua.

¡Scarlett!


El single de adelanto en un ripeo bastante lamentable (triste cuando descubres a los tres minutos que el tipo que canta es David Bowie). Supongo hay un montón de cosas más o menos reconocibles: las melodías con campanillas recuerdan a Hope Sandoval & the Warm Inventions, en el blog donde lo han colgado la gente dice que canta como una drag queen así que esa debe ser la rémora que tenía (a veces) de Nico y la Velvet /Jesus & Mary Chain en la interpretación vocal, las melodías shoegazer (o Mazzy Star), el sólo de banjo, las baterías con el golpe de Low (la reminiscencia de Motown),… Sigan uds. que yo estoy oxidado…

Otro día improductivo en el que:


- He pensado que quizás un estilo más casual, más relajado funcionaría ahora mismo en el blog, haciendo anotaciones pusilánimes y leves apuntes, mejor que no escribir nada o convertirlo en noticias y links.

- Leí una noticia en Yahoo Music sobre Vanessa Hudgens enunciada de tal forma que el único dato cierto que había era que pensaba publicar un disco nuevo. Ni videos porno, ni expulsiones de Disney, ni decisiones con su novio de no rodar la cuarta entrega de High School Musical (no participa ninguno de los actores principales), ni recuerdo que tuviera una imagen inocente, ni que la abandone y por no recordar, tampoco recuerdo la línea de su nuevo single sobre como le gusta que los hombres la miren. Gran ilusión conocer un cerebro menos funcional que el mío.

- Descubrí que bajar dos plantas de escaleras resulta más difícil que subirlas.

- Reflexiono mientras voy por la calle, pensando si existía alguna mujer que cantara música enérgica antes de Gwen Stefani. Si uno lee los comentarios y las críticas de los últimos años, parece ser que no. Todo el mundo la copia. La última en padecer tal síndrome es Santogold, que además también copia a Karen O, entre otra gente, en su agradable y contagioso, pero no necesario y adictivo, primer disco. Es curioso, las chicas siempre copian a la última de la lista, la que está de moda. Avril copiaba a Alanis, que copiaba a la anterior, pero al hacerse dominante en ventas, las nuevas chicas que hacen, no se, bubblegum rock según la crítica no se retrotraen a Alanis, ni si identifican con un arquetipo de interprete musical, son “Avril lite”. Si un muchacho de barba descuidada coge su guitarra y saca una canción medio aparente, se “inspira” en Neil Young, Bob Dylan o Leonard Cohen. Pertenece y aspira a la tradición.

- Pagué mis deudas con la sociedad (un pelín tarde).

- Comencé a leer “Convetional Wisdom. The Content of Musical Form” de Susan McClary.

- Mientras leía el primer capítulo del anterior pensé que definitivamente, debía aprender solfeo porque quizás resulta demasiado ridículo no llamar a un adjetivo “adjetivo” y sustituirlo por “palabra adyacente que hace brillar el contenido de la frase”. Quizás, digo.

- También pensé que quizás debería hacerme con un libro de musicología sobre la música gospel y otro de análisis de las formas literarias y los estilos narrativos en la canción popular en la música afroamericana del siglo XX. En el caso de que existieran, claro. Y que valieran entre los dos menos de diez euros, que es el presupuesto para el resto de la semana (cosas de pagar deudas).

- Me siento particularmente destructivo y decido que sí, que debemos hacer algo aunque cueste que nos expulsen de la secta. Así que el DVD-R de 7.8 Gb de La Monte Young interpretando íntegramente “The Well Tunned Piano” con las luces y proyecciones de Marian Zazeela, bajando y subido al blog la semana que viene. Y por si mi ratio no va a sufrir lo suficiente le añado otra descarga de un dvd con actuaciones televisivas de Son House y Bukka White. De algo hay que morir.

- Escuché el rumor, seguramente cierto si proviene de la lista de correo de !K7, de que Burial hace la próxima entrega de Dj Kicks.

- Pensé que no podría terminar nunca esa entrada sobre canciones de R&B de ahora mismo a tiempo de que fueran, eso "de ahora" y no de anteayer.

- Al mirar en internet referencias a los productores de una de las artistas, encuentro que además de escribir canciones tienen su propio grupo, definido como punk. Escucho la primera canción y cuando los golpes de batería que abren “Smells Like Teen Spirit” suenan en sample o en vivo, me digo: “Diablos, necesito escribir esa entrada aunque sea el mayor bodrio que el mundo occidental ha conocido. No importa, lo interesante es el viaje, el hacer conexiones.”

- Decido calentar la comida que ha mandado mi madre mientras escribo una respuesta a una entrada de Ana Saturno (obviamente sin separar los párrafos, mazacote + derivativo + inexacto en forma y contenido 4ever). La ingiero, me siento cansado, tengo frío, tiemblo de frío, me meto en la cama, me quedo dormido y al despertar mi estómago me dice que lugar del piso me espera).

- Pienso que debo desinstalar el Real Player de forma inmediata, ya que no contento con salir de forma automática como reproductor del DVD, además decide que vivo en la zona 1. No es que quisiera tener ningún contacto con el programa, pero por alguna razón desconocida el formato es popular en algunos videos orientales. Por continuar hablando de las malfunciones del software, a veces me da miedo poner ciertos discos de música experimental que tengan drones o pitidos, porque de repente, parece como si el sistema descubriera que esta funcionando incorrectamente (si alguna vez se les ha quedado enganchado el sistema, los pitidos no están muy alejados) y comienza a ralentizarse o volverse inestable, entre otras cosas raras. Además no es simple paranoia. Un día conseguí una pantalla azul de Windows poniendo un disco. Yu-ju.

- Sigo dándole vueltas a dos entradas tontas que no tienen sentido alguno y como podría hacer para incluirlas en el blog. Una iría tal que así:

En su invisible jukebox para la revista The Wire, The Dead C mantienen el siguiente intercambio con el periodista (Nick Cain):

Sun City Girls started their own label and indulged themselves by releasing far too much stuff. You also started your own label, but release almost nothing. In the current noise scene, it’s the norm to release 10, 15, 20 albums a year, but you release an album every three years.

Bruce Russell: I think we don’t have the luxury of doing a lot of playing together because we don’t live in the same town and we have lots of things to do like earning livings and raising families. But also we were relatively prolific for a period of quite a few years.
Michael Morley: It got us nowhere [laughs]
BR: All we wound up with was a huge unavailable back catalogue. We got a lot of it out of our system at that point. Now, one of the reasons that people do a lot of releases is that they need a lot of merchandise to sell at gigs. We don’t have any of that so there’s no real incentive. And also quality control…

Quality control is sadly lacking in the noise scene these days.

BR: You could say that, but it’s the kind of opinion that’ll build your popularity immensely [laughs]


No es la primera vez que escucho dicha teoría económica. En una entrevista o en un comentario, escuché que era también el motivo de la prolífica carrera de Acid Mothers Temple (en su página web el proyecto principal entre reediciones, recopilatorios, discos oficiales y cosas raras tiene listados cerca de 80 en poco más de una década (ni empezamos con los proyectos paralelos)) era la continua necesidad de estar girando ya que la renta para vivir en Japón es muy elevada y con su aspecto y peor su fama de drogadictos, no conseguirían un trabajo bien remunerado en Japón.

Esto genera una relación distinta con el público. Si suponemos el artista mainstream no depende de su especificad para vender 6000 o 60000 copias, girar y con ello vivir ese año, el músico de noise descansaría en los fans terminales del grupo, unos 600, que comprando los distintos artefactos conseguirían el efecto acumulado del artista mainstream de gama baja. Pero sin embargo, el artista se desentiende de su obra y es el público quien decide, a su apetito y de forma rabiosamente subjetiva, que es lo más destacable y trascendente de su producción.

La otra de este modo:

El motivo de esta entrada en el blog era mostrar con asombro, como ese detalle, la caída de un pendiente no podía ser mostrado con los medios convencionales de streaming. El vídeo en youtube o dailymotion hace invisible tal detalle. Y sin embargo la gente se forma opiniones sobre el contenido de una actuación, a veces con la única experiencia de esta en estas condiciones. El símil lógico sería hablar con esta lógica sobre la calidad sonora de los mp3s, los CDs y el vinilo. Pero en particular en el último par, es completamente inapropiada (la idea es que el CD muestrea el sonido, mientras el vinilo lo recoge de forma integra en su rango y capacidad limitadas materialmente, o en su caso la grabación digital directa a disco duro y la hecha en cinta analógica) y no se puede trasponer.

Otra anécdota sucede en una película de Olivier Assayas. Una miembro del equipo de una película, la decoradora en concreto habla de las diferencias en su campo entre el cine norteamericano y el francés. Su argumento es que en el americano, se gastan dólares y dólares buscando elementos o creando vestuarios que aparecen un segundo durante toda la película, para completar la apariencia opulenta, mientras que en el europeo es más funcional, esencialista, naturalista y ajustado al presupuesto. De nuevo, la idea sería trasladar esta relación con las producciones independientes y mainstream achacando las virtudes (libertad artística) y defectos (sonidos anestesiados/asimilados/acomodados, etc.) a la forma de presentar los sonidos y su atención al detalle. También es inadecuado. Los CDs antes de publicarse pasan todos por el periodo de masterización que homogeniza los sonidos y en teoría hace que todo lo que estaba en la producción se escuche indistintamente en los equipos más sofisticados como en los más cutres y con mayor coloratura). Y es en ese proceso cuando se establecen los niveles de sonido y la compresión para sonar en la radio. Aunque después en la radio el sonido igualmente se comprima. Pero sigo interesado en encontrar más analogías en la que una realidad aparente en el campo visual se aplica como base de un razonamiento sobre lo que se percibe con otro sentido.

- Compruebo mi teoría en la que el número dos de Woofah, en caso de ser un fiasco (que no lo es ni por asomo aunque aún no he leído algo que no sea el comic de Woebot) serviría por su formato como alfombrilla para el ratón. Sí.

- Pienso como el nuevo disco de Nas, cuando sea que se publique, va atrayendo una serie de atención en forma de artículos, columnas y comentarios que pueden desencadenar un debate a nivel nacional en EE.UU. sobre lo políticamente correcto como forma de soterrar el racismo, las heridas todavía no cerradas de la esclavitud, etc. Y pienso que si lograr ese debate es más o menos importante que el hecho de que el disco sea musicalmente “grande” o no, o que el artista sacrifique su individualidad rebajando la complejidad de su música para exponer de la forma más directa y cruda lo que piensa.

- En el nuevo videoclip de Bun B, uno de los acompañantes lleva escrito en la camiseta “Gansta is the new Smart” y en el que la canción, típica producción sureña, enérgica, llena de electrónica, maquinal y húmeda, algo aburrida, en su parte lírica, por lo poco que entendí, va en la misma dirección, tratando de redefinir el significado de dicha palabra. Por ejemplo la última parte en bruto, sacada de una traslación colgada en internet:

“Mane I'm a gangsta call me the hood superstar, and I'm a gangsta ridin in my candy painted car, cause see a gangsta always down to rep for his hood, and to do a little bad so I can do a little good, a gangsta don't forget where he came from no matter where he go or where he been keep it gangsta till the end, cause I'm a gangsta and I'm a always love my city, make money but don't act like I'm above my city, cause gangstas will always give back to the ghetto, and gangstas will never turn their back to the ghetto, that's a fact in the ghetto, it's never been a lie, so I'm a keep it gangsta till the day that I die”.

- Me pregunto si en los foros de Harry Potter las conversaciones habrán pasado repentinamente de hablar sobre el juicio y las lágrimas de J. K. Rowling a hablar sobre el vello púbico de Emma Watson.

- Recuerdo al escribir lo anterior que el Word no sabe lo que es una vagina pero si lo que es un pene o un testículo. Curiosa visión del mundo.

Bolachas muertas.

Muere Bebe Barron.



El nuevo recopilatorio de ~scape está lleno de nombres reconocibles del dubstep. Y además también tiene otro calamar gigante en la portada. Um…

Cosas que se encuentran haciendo el tonto. Títulos de los artículos encontrados en una primera incursión:

The Situationist International in American hardcore punk, 1982-2002

Covering disclosures: practices of intimacy, hierarchy, and authenticity in a Japanese popular music genre

She told me what to say: the Beatles and girl-group discourse

South African music after Apartheid: kwaito, the "party politic," and the appropriation of gold as a sign of success

What is indie rock?

Reaching out to the core: on the interactional work of the MC in Drum & Bass performance


Y otras 614 entradas (aunque incluyen reseñas de libros y discos) consultables. No he leído ninguna de las de arriba (hasta que no haga unas cosillas estoy en piloto automático), seguramente la mitad no se enterarán de nada de lo que se suponen que están hablando o utilizarán referencias tan fuertes que tiran de espaldas, pero de todas maneras sirven para orientarse y apuntar nombres y títulos en las bibliografías. (Uno por ejemplo con los libros sobre J-pop y cultura popular japonesa que no conocía ninguno). Such a nasty way to start the day…

And the beat goes on...

HDB011 - 12" vinyl
A. LV & Dandelion - 'CCTV'
AA. LV - 'Dream Cargo'

Cuatro artículos en The Guardian que no he leído:

Jon Savage selecciona los 10 temas esenciales del acid house

20 años del segundo verano del amor

Paul Morley vs. Mariah Carey

30 años desde el Rock Against Fascism (estamos novedosos…)

A-hum


Definitely.



Ciertamente, existe una industria con un serio problema de goteras, humedades y filtraciones.


Vaya, según esto finalmente el libro de Steve Goodman (Kode 9) se publica el año que viene. Esperemos que no sea tan denso en su terminología como en este artículo.

Se ha filtrado el nuevo de Flying Lotus. Lo estoy escuchando a las seis de la madrugada. Los primeros temas suenan mejor de lo que esperaba. Mi cerebro cansado dice que hay una narratividad, un algo que contar, bastante ajeno a la impostura más o menos esteticista del disco anterior y algunos de sus temas recientes, fantásticos en su realización pero indiferentes en la escucha. Suena bonito, agradable. Me lo imagino sonando en “Siglo 21” de Radio3. Está bien, como lo interpreto… Hay breaks más o menos continuos, y otros elementos rítmicos que aparecen puntualmente añadiendo complejidad a los ritmos. La armonía y la melodía se presentan como capas que se superponen. Hay angularidades de vez en cuando, superposiciones de unos sonidos con otros,… Vale, el disco se llama “Los Angeles” y esa ciudad está llena de contrastes: inmuebles de una planta, rascacielos de arquitecturas imposibles, barrios residenciales, mansiones, barrios pseudo-hippies y a todos ellos se llega conduciendo un coche (la ciudad está pensada para ello). Puedo escuchar la radio, cambiar de dirección al girar una esquina, ver como la calle cambia de volumen durante este y se muestra alargada hasta el próximo cruce. Siento el calor en la piel. Veo los reflejos en las lunas comerciales, los reflejos de los reflejos en los muros cortina de los grandes centros, los descampados, las colinas al fondo, los amasijos de colores entrecruzándose entre la mirada y la memoria de lo que dejamos atrás, las colisiones de los habitantes de los distintos barrios, sonidos de otros coches, palabras en distintos idiomas, formas de vestir, de caminar y estar según sea un área residencial o comercial, sucediéndose todo ello desde el refugio del interior del coche,…. Muy bien, ahora sólo falta buscar una conexión emocional. Cuando duerma…o con las escuchas.



Si hacemos caso a esto y esto parece que existe la posibilidad de que se reedite este tocho. En caso de suceder, debería comprarlo aunque seguramente esté en contra de casi cualquier frase escrita en sus páginas. El libro, que se supone es la narración de una historia oculta (de ocultismo) de la música británica a través de la música de Coil, Current 93 y Nurse With Wound, fue publicado originalmente en una edición en tapa dura, CD de regalo con temas difíciles de encontrar o exclusivos y alguna cosa más, en edición limitada. La versión de tapa blanda se publicó un año después agotándose la tirada al poco tiempo, suponemos ignorando el tirón que pudiera tener esas bandas entre su público, pequeño y desperdigado, pero dispuestos a comprarse cualquier cosa referida a sus artistas y más cuando se ofrece una visión de su música y su vida. Ya son ganas escribir un libro que uno quiere que la gente no pueda leer para gozar de su exclusividad con los iniciados (que lo pusieron bastante mal por centrarse demasiado en David Tibet). La estupidez inherente al proyecto planteado en dichos términos y de la cultura masculina, egocéntrica que refleja.

Y ya que estamos puestos, esto también.

Just for fun...


Stereogum fue creada por Scott Lapatine en 2003. Anteriormente trabaja en VH1, al menos generando contenido para su página web (en forma de textos, entrevistas, columnas o fotografías de conciertos), canal televisivo perteneciente a MTV Networks y propiedad de Viacom. En 2006, Lapatine buscaba inversores que le permitieran expandir su website y contactó con su antiguo jefe, Jason Hirschhorn, ex-chief digital officer de MTV Networks.

Hirschhorn inició su carrera como interno en Warner Bros. Records, diseñando y construyendo páginas web para artistas. Al final creó su propia empresa, Mischief New Media, que aglomeraba toda una serie de páginas dedicadas al mundo del entretenimiento. MTV Networks compró muchas de esas páginas y finalmente la empresa, entrando Hirschhorn a trabajar en la compañía en el 2000 encargándose de desarrollar las estrategias de mercado de la división de medios digitales de la compañía. Tras ello, en 2006 cofundó TripleH Media Advisors, una consultoría para empresas antes de ser fichado como presidente de Sling Media Entertainment Group. Uno de los clientes a los que asesoró fue a Robert Pittman y su Pilot Group.


Robert W. Pittman, empezó a trabajar como discjockey a los 15 años en una emisora local de Jackson, Mississippi. De allá saltó a emisoras en Milwaukee y Detroit hasta aterrizar como director de programación de la WPEZ-FM en Pittsburg, llevando su formato de radiofórmula de “contemporary music” a ser la más valorada. A los 20 años esto le llevo a una emisora de country, que llevó del puesto 22 de la más escuchadas al tercero. De este modo continuó propulsando emisoras hasta ser fichado por la Warner como jefe de programación del canal televisivo “The Movie Channel”. Al año siguiente ya era jefe de programación de la Warner Satellite Entertainment Company (WASEC). Y entonces creó MTV.

Tras ello, se convirtió en director ejecutivo de MTV Networks, relanzando Nickelodeon, creando VH1, expandiendo la marca a otros mercados o sacando a bolsa la compañía. Tras intentar comprar la compañía, abandona MTV y crea junto con MCA, Quantum Media. La compañía es adquirida en 1989 por Warner y pasa a ser asistente, y al año siguiente director ejecutivo de la compañía. Por ahorrar tiempo, de allí paso a AOL, desarrollo la compañía, propició la fusión AOL-Warner, su fracaso y su abandono. Tras ello, decidió formar The Pilot Group, una firma de inversión en nuevos medios. La función del grupo es invertir en el capital de nuevas compañías que esta emergiendo y que tienen el potencial de ser muy rentables económicamente en unos años. Y venderlas a un precio acorde.


Ese fue el caso del newsletter DailyCandy, especializado en ofrecer reportes diarios a sus suscriptores de que está de moda en ese instante (y esa es la palabra, no temporada, mes, semana o día), creada por Dany Levy, managing editor del New York Magazine. La compañía salió el año pasado a un precio de venta de 100 millones de dólares, tras haber conseguido una posición dominante en ella mediante una inversión de 3.5 millones en 2003. Algo que se logró gracias a la intercesión de un amigo de Levy con Pittman: Jason Hirschhorn. Aunque Pittman no logró la venta, si obtuvo la confianza en el ojo de este último. Así cuando Scott Lapatine, busco consejo, obtuvo la inversión tanto de Hirschhorn como de Pittman en su negocio. Una parte importante del éxito de Pittman es el de no cambiar la personalidad de una marca o sus rasgos distintivos en forma de gente con talento (discjockeys, presentadores, escritores, etc.).

El asunto es que en diciembre de 2007, saltó la noticia de que los tres propietarios de Stereogum habían cedido su inversión de capital por 5 millones de dólares a Buzznet en forma de participaciones en la compañía (para los dos inversores, no el creador, parece). Stereogum seguía perteneciendo a los tres pero controlada económicamente por la otra compañía. Stereogum fue adquirido completamente por Buzznet a principios de abril, siendo reforzada con la creación de Videogum. El asunto es que Buzznet, para ello necesitó buscar nuevos inversores para poder aumentar su capital hasta los 25 millones de dólares y hacer frente a la adquisición así como la expansión de la compañía. Y uno de los inversores fue Interscope-Universal Music.

El 17 de abril se hizo público el comunicado la creación de una alianza con Buzznet, lo que significa que puede Universal participará de manera directa en la elaboración y programación de los contenidos que aparezcan (en este caso la promoción de sus artistas mediante blogs y noticias exclusivas), compartir los beneficios y poder integrar en la página web audio y video en streaming todo el catálogo de Universal así como contenidos exclusivos. Recientemente Buzznet adquirió también el blog Idolator tras ser puesto a la venta por su compañía creadora, Gawker Media. Pero no se preocupen, que Scott Lapatine seguirá supervisando Stereogum y este seguirá siendo indudablemente un reducto indie completamente al margen del mainstream.

"The former Talking Heads front man also said “I’m finishing up a record with Brian Eno, a musician that I worked with 30 years ago. We did a record together of songs, and that’ll come out."



Pueden disfrutar o padecer de un concierto de High Places en Pitchfork TV.

Resonance FM* está emitiendo una serie de diez programas de media hora de duración llamada The Tone Generation que trata de ser una historia de la música electrónica analógica (es decir, de los pioneros del género) a lo largo y ancho del mundo. Cada episodio se centra en un país, por ejemplo, el primero está dedicado al Reino Unido. Dado el formato del programa consiste en una sucesión de temas con leves apuntes biográficos e históricos (en el caso de centros subvencionados por el estado, aquí el Radiophonic Workshop de la BBC). El feed del podcast se puede encontrar aquí.

*La radio creada bajo el paraguas del London Musician Collective que consiguió mantener su subvención hasta 2012.

Fácil el tema que más he escuchado estos días.


Curioso artículo sobre los nuevos habitantes del East Side neoyorquino.

El código de acceso tras varios días de espera, indefectiblemente, estaba en un mail en la sección de correo no deseado. Así que ya puedo leer estas cosas tras tanto tiempo. Claro, si pudiera durante estos días o en las próximas semanas. Puedo hacer lo de siempre, colocarlos en el blog y usarlo de archivador para ordenar los recuerdos, disponer de los distintos acontecimientos que sucedían simultáneamente, no reconocerme al leerme al pasar los años.





O como atajo, juntando esto artículo y enlazándolo con este video complementario.





O como mera manera de poder encontrar un link cuando no sepa donde he guardado la página web o si aún la tengo en el disco duro. Puro egotrip.





"Wayne charges $100,000 for the average cameo — or $75,000 if he likes the beat or the song. "But nothing less!" Wayne says. "I wouldn't do a song for my sister for less than $75,000."

OMG (en caso de ser cierta la información)


Hace poco di con una lista de libros sobre música, más o menos influyentes dentro del mundo de los compositores (norteamericanos) de música contemporánea, que se quejaba agriamente de que muchos de ellos estuvieran descatalogados. La palma se la llevaba uno que en la edición más barata disponible de segunda mano se vendía a 268 libras esterlinas. Otro ni aparecía disponible de segunda mano. Hay uno muy interesante que se puede conseguir a un precio medianamente razonable (38 $) mediante petición directa a los autores. Me haré un poco un lío con dólares y cheques para hacerme con una copia y una vez que lo lea ya les comentaré que tal. Uno que se había reeditado desde la fecha de confección de la lista (2003) era este, un análisis histórico del temperamento y los distintos tipos de afinación.


En otro orden de cosas, ¿mini a-hum?



Está bien no hacer caso a la memoria de uno. El recopilatorio no era sobre Cristina sino sobre el propio August Darnell. A veces me pregunto si el culto que genera (todo periodista musical parece conocerlo) es una manera de verbalizar todo aquello de lo que estos mismos críticos dicen, adolece y carece la música negra mainstream y que si su importancia real consiste en el valor de esa crítica o en el de sus obras (y me gusta su música). Viene con un texto de Vivien Goldman, experta en esta materia que ya había publicado un libro al respecto.

Me pregunto si la prensa británica estará hoy llena de variaciones y giros sobre una perspectiva que podríamos resumir del siguiente modo:

“Gracias a Leona Lewis la colonia rebelde está más cerca de claudicar”


Kode9 y Spaceape están dando una serie de conciertos estos días bajo el título “Bass Fiction”. Este video es más largo pero el sonido es nefasto y está montado con distintos momentos de la actuación (lo que tampoco lo hace más entretenido). Mejor ilustración sonora aquí, allá y acullá (aunque tampoco mucho ya que apenas llegan a los dos minutos). Se supone que publican disco nuevo para finales de año.


El diablo probablemente

Da vértigo poner los pies en la tierra.

En la sala de espera cuando los tonos de los móviles suenan al recibir una llamada el volumen al que lo hacen parece irreal. De las seis o siete unidades distintas algunas comparten el tono por defecto, otros tienen otro igual de minimalista, alguien ha puesto el sonido que hacían los teléfonos antiguos y sólo una persona tiene una canción puesta: “Ayo Technology” de 50 Cent. En un documental sobre música sacra que estaba viendo estos días hablaban sobre como la gente de los pueblos alrededor de París tenían miedo a dicha ciudad porque hasta ellos llegaba el ruido que se generaban en la vida cotidiana y en los mercados. En esta entrevista a W. G. Sebald que encontré en un blog de filosofía, menciona como desde Londres se pudo escuchar el sonido de una batalla que estaba ocurriendo en Lowestoft (Suffolk).

Entonces, el debut de esta chica es el disco de country mainstream de este año que pueden escuchar aquellos y aquellas que normalmente no lo hacen. Bien. Además también recomiendan este otro (la historia de la canción es fantástica).


Ahora debería ponerme al día con el metal (lo único que se es que Opeth y Messhugah han publicado o piensan publicar disco, así que empezaré por esos mismos).

Formas de consumir un domingo:

Comenzar a escribir un largo artículo sobre los formatos musicales, frecuencias de muestreo, etc. No terminarlo tras toda la mañana y abandonarlo.

Comenzar a escribir un largo artículo sobre la presunta autoridad moral que uno extrae de incluirse en una narrativa heroica basada en sus experiencias como oyente como respuesta a la ausencia de una autoridad, digamos, material (presencial, histórica, musical, etc.) y hasta que punto la construcción del personaje lleva a uno a falsear su propia historia y el valor de la experiencia vivida. Que era lo que quería decir en el post de Dodgy. Y que obviamente es un latazo de escribir y abandono.

Comenzar a preparar mi primera muxtape. Tengo que decidirme entre 22 temas de minimal techno reciente y hacer una selección que no cojee demasiado. Finalmente reduzco los temas a 12, los ordeno, escucho, esto falla aquí y allí, vuelvo a escuchar, vuelve a fallar aquí, me da igual, voy a la página, voy a subir el primer tema y el límite es de 10 mb. El primero pesa 16 y es de los temas más cortos. Abandono, aunque puedo poner este estupendo tema aquí.

En fin, enlaces, enlaces:

Un artículo sobre el nuevo docudrama de Koji Wakamatsu centrado en el grupo terrorista Nihon Sekigun que acabo con un asalto por las fuerzas del orden que duró 10 días y que se retransmitió todo ese tiempo en directo por televisión.

Este otro documental japonés también está levantando una polvareda tremenda ya que mete el dedo en la llaga de la moderna historia japonesa. El santuario Yasukuni es un templo sintoísta que rinde tributo a los espíritus de los soldados muertos. El problema no está tanto en los caídos en combate durante la segunda guerra mundial, sino que en 1978 se incluyeron 1068 criminales de guerra, entre ellos 14 acusados de crímenes contra la paz. Esto es favorecido desde la extrema derecha y en menor medida por los conservadores, buscando una relectura de la historia que se muestra en los continuos debates sobre lo que debe ser enseñado a los estudiantes en los libros de historia como militares que fomentaron el suicidio de habitantes de población, como en cada país que ocupaba Japón se formaban por usar el término que conocen “joy divisions”, la negación de actos de combate, etc. como excusa para exaltar y ensalzar el espíritu nacional. Además de generar problemas de separación entre religión y estado cuando los primeros ministros lo visitan.

¿The New York Pop Music Canon?

Un artículo sobre las relaciones entre las canciones de Igor Stranvinsky y su vida personal.

Y vía Simon Reynolds, el blog de la revista The Wire.


Ya disponible como descarga.




Esta canción me ha dejado muerto.



Ni recordaba que este grupo había existido…


Escuchando actualmente:

Graham Lamkin & Jason Lescalleet “The Breadwinner”
The Advisory Circle “Other Channels”
Mariah Carey “E= MC²”
Scuba “A Mutual Antipathy”
Peverelist “Infinity is Now/ Junktion”
Cut Copy “In Ghost Colours”
Of “The Sun and Earth Together”
The Backyardigans “Born to Play”
Anja Schneider "Beyond the Valley"

Pues un programa televisivo de hace 25 años no daría para conseguir el contrato para un libro, pero sí para un artículo de El País

Un artículo sobre los nuevos (y por una vez importantes e interesantes) artistas blancos de la escena reggae

Sir Harrison Birwistle estrena su nueva ópera

Y se ve que se publica ahora el nuevo de Portishead por la cantidad de artículos que aparecen.

La revista de The Wire lleva varios años siendo muy criticada desde que Rob Young dejó su dirección, por su reorientación hacía el terreno algo yermo en lo estético y lo intelectual pero más solvente en lo económico que ocupaba Forced Exposure y ahora revistas como Signal To Noise (psicodelia, experimentos electro-acústicos, rock improvisado, free-folk, noise, etc.), la perdida de algunos de sus escritores más solventes, el fichaje de nuevos provenientes del mundo del indie rock, la perdida del pulso de lo que está sucediendo en la escena de la música europea improvisada y el EAI, la pérdida de valor en los contenidos así como en la veracidad y fiabilidad de sus informaciones, etc. Dicho lo cual, me alegro del giro que está dando en los últimos meses de nuevo hacia la música popular dejando de lado tanta mugre mistificada como arte rompedor y explorador (¿?) y viendo la portada y el contenido del último número me he decidido a suscribirme. Yi-pi. No se pierdan la galería de arte de Underground Resistance.

Un artículo muy mono sobre Helmut Lanchemann.

(Mucho mejor que esos artistas neo-folk como Devendra Banhart o Joanna Newsom apareciendo en las revistas del corazón)

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