Cada día me siento más ignorante (gran idea cuando uno quiere fingir ser un crítico cultural). Por ejemplo, el J-Pop. Tengo fijaciones por artistas en los que en la mayoría de los casos no he escuchado todos sus singles (que suelen rondar en número desde los 20 a los 50), sin entrar siquiera a escuchar los discos. Se que ni siquiera trato de contextualizarlos en los códigos de conducta del Idol, ni siquiera en lo social, ni siquiera en el contexto de la demás música que se hace en Japón en estos momentos. En fin, resulta difícil ponerse ese manto de autoridad con el que uno parece hablar por encima de todo.
Por decir la verdad, tampoco controlo mucho lo que se supone que debe hacer un idol. Creo que se resume en tener que ser superprofesional, superagradable todo el tiempo y estar infinitamente agradecido a todo el mundo por estar disfrutando de esta oportunidad. Y fingir no tener personalidad propia u opiniones. Por ejemplo, hace poco salieron estas fotos de Goto Maki, que son la primera señal que ha dado de estar viva desde que dejó el management del Hello! Project. Aparece fumando y jugando en un salón de pachinko.



Esta chica tenía un blog, pero no lo ha actualizado, porque básicamente los blogs que escriben los idols (y esta categoría va desde el pop a las estrellas del porno) pertenecen a las compañías y son instrumentos promocionales. La reacción de los fans ¿alegrarse por dar señales de estar viva o por ver que sigue con su vida? No. Asombrarse por su mal comportamiento. Ya contamos en otra ocasión en el lío que se había metido Erika Sawajiri por no mostrarse profesional (lo que básicamente provocó que perdiera todos sus contratos y que su carrera musical esté aparcada hasta final de año) o en el que se metió hace poco Koda Kumi por hacer una broma sobre vaginas (me gustaría explicarlo pero casi nadie fuera de Japón tiene idea de que fue exactamente lo que pasó…)

Además es un terreno de relaciones bastante extraño y se puede subir o bajar en la escala, pasando de ser estrella del pop fracasada a Gravure Idol (una chica que hace videos eróticos pero que puede o no incluir la desnudez (algo que en la práctica ya va añadido en algunos casos)) y de ahí a AV (Adult Video) Star, pero no es extraño tampoco que suceda al revés y que chicas del porno graben sus propios discos como Honoka o Yuma Asami. O que gravure idols, terminen siendo cantantes o actrices muy populares, como es el ejemplo de la mencionada Erika Sawajiri,




Ueto Aya Kizuna
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Aya Ueto (que fue descubierta en un concurso de belleza y no realiza material erótico pero tiene decenas de libros fotográficos, así que en cierto modo, también participa del transfondo de esta cultura)




O Aoi Miyazaki (que renunció a participar en la segunda entrega de “Nana” (una de las películas y mangas más populares recientemente en Japón) por incluir escenas con desnudos, aunque aparte de ser actriz y haber rodado cientos de anuncios, tiene una carrera como U-15 (Under 15 (años de edad)), con ella posando en todo tipo de situaciones y vestidos, incluyendo obviamente los bikinis. Fue sustituida por Yui Ishikawa, otra gravure idol. No se si hay una manera más gráfica de exponer lo machista que es la sociedad japonesa en según que aspectos.

Algo que no normalmente no suelo hacer es hablar de chicos o grupos de chicos. Normalmente porque no suelo escucharlos, pero en la práctica son más numerosos y populares que la mayoría de las chicas. Por poner un ejemplo, que más o menos si he escuchado sus singles, este es el último de L’Arc~en~Ciel, que es uno de los clásicos contemporáneos.




Para dar una idea del tamaño que tienen, en Japón suele ser extraño que el single de un grupo venda más de un millón de unidades. Ellos tienen tres al menos que han superado esa cifra. LPs llevan vendidos más de 15 millones.

En realidad creo que me gusta más la idea de entender el J-Pop como si fuera country, donde lo más importante son las canciones y los discos tienden a ser accesorios. Aunque claro, ¿las canciones son importantes por el éxito que tengan en Japón o por mi criterio personal? Este es el radio-rip del nuevo single de Morning Musume, donde retornan al sonido “clásico” del grupo (que a mi me deja un tanto indiferente), supongo que como respuesta a lo que va dibujándose como la decadencia comercial del proyecto.




En fin, hablemos de Hitomi Shimatani. Este es su nuevo single, la versión larga del vídeo dura 15 minutos y esta llega a seis (no canta hasta los dos minutos)


El otro día me enteré de que interpretó en japonés una de las canciones de la primera entrega de High School Musical



Siempre ha hecho un pop muy comercial, pero muchas veces con resultados excelentes por ejemplo cuando se acerca al trance-pop (en retrospectiva una de esas canciones que empecé a escuchar para poder creermelo y que me engancharon al género)






O cuando se mete en cruces entre guitarras twang y secciones de viento que recuerdan al ska, pero ella domina el conjunto con su personalidad en la interpretación



O cuando los videoclips tiran hacia lo mitológico, entonces parece habitar un espacio propio dentro de la música del país. Normalmente no se suele traducir en grandes éxitos, pero es bastante popular como personalidad y modelo.


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