Escuchando:




El último es el nuevo disco de Glenn Branca. Últimamente…,erm, siempre, me ha costado bastante hablar sobre la música que estoy escuchando. Es decir, ¿qué sentido puede tener que les cuente sobre los (pocos) discos que he comprado este año? ¿O sobre los (también pocos) que he escuchado y apreciado? Sé que no voy a compartir nada nuevo, y en el fondo, creo que tampoco se pretende, pero dudo que a estas alturas esas pequeñas cosas puedan interesar a nadie. Claro, ya se que no ha de ser “interesante”, aquí no van a descubrir géneros y discos desconocidos, nunca se ha tratado de eso. Pero hay algo erróneo en este planteamiento: pasar de la novedad del tratamiento que pueda dar mi escucha de algún disco a simplemente la “novedad” del disco. En el segundo caso, este blog resulta bochornoso. Uno puede imaginar la cantidad de sitios mejores donde uno puede encontrar mayor o más información y extenso comentario sobre la música, cine o libros sobre los que giramos por aquí. Pero supongo que la razón por la que acabo por aquí siempre, cada vez que pienso en dejar esto, se puede resumir en aquella línea de una crítica de “Oh!” de SNSD que necesité apuntar en algún sitio cuando a principio de año dudaba si volver a escribir algo o dejarlo por completo: “Only SNSD could pull that song”. Si hubiera un blog que me resultara más entretenido que el mío hablando de los temas de los que se hablan por aquí seguramente no necesitaría escribir el mío, pero no recuerdo haber encontrado ninguno (tampoco he buscado mucho en Google por “Keith Rowe + Momoiro Clover”). Todo el mundo piensa que lo escribe o piensa son banalidades, y bueno, sí, seguramente lo sean (yo siempre pienso en la cantidad de errores y horrores en los que consiste mi rastro digital a lo largo de una serie de blogs), pero eso no quiere decir que no sean únicos. Es un poco como los sintetizadores analógicos: cada fabricante tenía que construir sus circuitos manualmente superando sus problemas y deficiencias, de modo que aunque el funcionamiento del tipo de síntesis de sonido fuera el mismo, la forma de actuar de las partes del instrumento funcionaba únicamente bajo sus propios patrones. Cada persona filtra las novedades de un modo concreto, reflexiona sobre ellas de acuerdo con sus circunstancias, experiencias y su manera de razonar, y encontrar eso, la expresión clara de eso, no las excusas para no extenderse, o el circular de lugares comunes y chascarrillos cada vez que llegamos a una zona “oscura” en nuestro discurso, es algo siempre importante, aunque sólo fuera por la necesidad de mirar lo que hace otra gente, ver lo que otra gente aprecia y de este modo no perder el compás en la canción que se está interpretando. Claro, esto no sirve de nada si no se tiene el tiempo para poder hacer esto, pero bueno al menos sirve para que una excusa no pase a ser un complejo…

Viendo:




Leyendo:


2 comentarios:

Ana Saturno dijo...

anhh:

Siempre me ha gustado hablar contigo, en forma de comentarios en uno u otro blog. Eres de las pocas personas que he encontrado en eso que llaman "blogosfera" que me hacen pensar, y eso es un lujo que no está al alcance de cualquiera. Incluso en las entradas en las que sólo se muestra la portada de un libro o un disco, consigues que me interese no sólo lo que es ese libro o disco en concreto, sino el por qué lo habrás puesto en el blog.

Y ése es uno de los motivos por los que me da pena no ser capaz de participar tanto como antes. No poder escuchar tantos discos como solía, no tener ganas de publicar enlaces, no poder leer todo lo que me gustaría. Nunca me había planteado el blog tal y como lo expresas en esta entrada, pero me temo que si yo buscara en Google las cosas sobre las que solía escribir, seguramente me saldrían muchos otros blogs. No escribirían de la misma manera ni con la misma mirada, eso sí, voy a concederme al menos eso.

Pero últimamente había llegado a un punto en el que me repugnaba un poco la exhibición de conocimientos en forma de "mira qué vídeo más estupendo" o "esto es un temazo y que se quite lo demás" que encontraba en internet cada vez más a menudo. Y cuando Los Latidos llegó al punto en el que yo hacía poco más que eso, empecé a darme un poco de asco a mí misma yo también. Sobre todo porque los vídeos y las canciones ya están en otros blogs, y esa es la diferencia con el tuyo.

Un día me di cuenta de que sólo enlazaba las cosas más raras que se me ocurrían, sólo por diferenciarme un poco. Y decidí que ya nada tenía sentido y que era hora de empezar a escuchar la música por libre, a mi ritmo, pasando de las novedades y buscando las cosas que sé que me pueden gustar y tengo pendientes. Entonces escuchar música volvió a ser un proceso más introspectivo, y hablar de ello se volvió más difícil.

Es verdad que también tengo muy poco tiempo, y quizá cuando tenga más la cosa cambie un poco. Pero cuando vuelva me gustaría que fuera sintiéndome un poco orgullosa de lo que hago, como cuando publiqué las entradas sobre Zebda, que sin duda son lo mejor que he hecho en Los Latidos, y no como ahora, que parece que al mismo tiempo que publico una entrada estoy intentando escapar de ella.

Perdona si me he extendido demasiado (como de costumbre) y que de alguna manera parezca que te estoy pidiendo permiso para dejar de escribir :-) Ahora mismo necesito de verdad esta pausa; más adelante ya veremos.

Intentaré que esta incapacidad transitoria no termine siendo, como dices, un complejo. No me gustaría.

Saludos

anhh dijo...

Sí, claro, prueba a buscar “novela negra + Zebda”. O “parto de nalgas + The Bug”. O “DJ + gentrificación +Segunda República”. No es una forma de escurrir el bulto, ahora mismo estoy interesado en como pasan las cosas en el mundo, es decir, como escucha la gente música embebida en su vida, en esta época, en este estado de la sociedad, en estas circunstancias económicas, etc. La “pose” en la red, la excelencia en la retórica del discurso o, bastante mejor, la auténtica demostración de conocimiento sobre aquello lo que se habla, no es una gran garantía de que acabe leyendo lo que se publica en otros blogs o lugares web.

Pero no quiero parecer que estoy tratando de convencerte. Si tomar distancia, respirar o como quiera que lo llamemos es lo que necesitas o lo que necesita tu blog, me fío de ti, como hago con tantas otras cosas. Pero si supongo que he necesitado contestarte, o argumentar en contra, no es tanto por los motivos que expones, que considero que son reales y pueden afectar a cualquiera, como por los efectos que pueden generar combinados. Si ahora tienes otro ritmo de escucha, escribe a ese otro ritmo. Si tus escuchas ahora son más íntimas y hacen que escribir resulte más difícil, bueno, eso es precisamente lo que hace esto interesante, explorar para tratar de explicarse a uno mismo lo que sucede o lo que cree conocer sobre algo. Las entradas más desarrolladas y depuradas, en el fondo son lo mismo, actualizaciones de un paradigma, pero con mucha mayor atención al detalle y trabajo detrás. Pero, no se, a mi me resulta bastante paradójico también cuando decido hacer eso, dedicar más tiempo y esfuerzo, por no tener tiempo para escribir determinadas entradas. Pensar que leyendo 10-20 libros, algunas de las cosas que quiero decir tendrán un mayor rigor, para usualmente descubrir que dichos libros, salvo tal vez algunos apuntes o páginas, no tienen nada que ver con lo que querías contar. Hay momentos de distinta intensidad.

Archivo del blog